Las empresas comerciales españolas, principalmente las dedicadas al comercio al por menor, pueden aprovechar un amplio espectro de incentivos públicos diseñados para respaldar proyectos que impulsen la innovación, el avance tecnológico, el compromiso con la sostenibilidad, la accesibilidad o el fortalecimiento de su posición competitiva en el mercado.
En IASAF, contamos con una amplia experiencia en facilitar el acceso a estas ventajas para el sector comercial, incluyendo opciones como la financiación en condiciones preferentes, ayudas directas no reembolsables, beneficios fiscales, y estímulos específicos para la investigación, desarrollo e innovación.
En IASAF ofrecemos un servicio integral para empresas comerciales que buscan acceder a financiación pública, tanto nacional como de la Unión Europea. A través de un enfoque personalizado, maximizamos las oportunidades de financiación, garantizando una integración óptima de estos fondos con la estrategia de crecimiento de cada empresa.
Las iniciativas de investigación y desarrollo en el sector comercial existen y, además, son fundamentales para impulsar la innovación, mejorar la competitividad, y satisfacer las cambiantes demandas de los consumidores. En IASAF también ayudamos a empresas de este sector a optimizar las ventajas fiscales ligadas a I+D+i dentro del marco tributario español, transformando sus inversiones en investigación y desarrollo en considerables ahorros tributarios.
Paralelamente al servicio anterior, también ofrecemos un servicio exclusivo dirigido a optimizar la inversión en investigación y desarrollo a través de bonificaciones en la seguridad social por el personal investigador dedicado en exclusiva a trabajar en proyectos de I+D. Proporcionamos asesoramiento experto en la identificación del personal elegible en cada organización, la preparación y presentación de la documentación requerida, y la implementación de estrategias para la reducción de costes laborales.
Implementación de nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial, el comercio electrónico, o la automatización de procesos.
Reducción del impacto ambiental, como la mejora de la eficiencia energética, la gestión sostenible de recursos, o la implementación de prácticas de economía circular.
Desarrollo de nuevos productos o servicios, o significativas mejoras de los existentes, especialmente aquellos que responden a necesidades emergentes del mercado.
Entrada o expansión en mercados extranjeros, incluyendo la participación en ferias internacionales, misiones comerciales, o estudios de mercado.
Capacitación del personal en habilidades clave para el negocio, como marketing digital, gestión logística, o atención al cliente.
Inversiones en instalaciones que reduzcan el consumo energético o que promuevan el uso de energías renovables.
Mejora de la accesibilidad de los establecimientos comerciales para personas con discapacidad, incluyendo la adaptación física de los locales y la implementación de tecnologías asistivas.
Renovación o mejora de locales comerciales, especialmente en zonas históricas o rurales, con el fin de preservar el patrimonio y fomentar el turismo local.